En el transcurso del año Línea Libre, nuestro canal de apoyo psicológico al que niños, niñas y jóvenes pueden acceder para recibir atención por parte profesionales capacitados/as en orientar y acoger diferentes problemáticas que puedan estar atravesando, ha alcanzado más de 9.000 atenciones, aumentando su actividad en un 293,53% en comparación con el año pasado (junio-noviembre).
Los motivos de consulta se han concentrado en temas relacionados a la salud mental, como la ansiedad, angustia, crisis de pánico, entre otras. Esta situación se explica, principalmente, por las consecuencias que ha tenido el confinamiento causado por la pandemia, que ha generado cambios en las rutinas y hábitos de todas las personas. Pero también han destacado otras temáticas como conflictos interpersonales, abuso, violencia y consultas sobre parentalidad.
Según un informe de ONU Mujeres sobre el impacto de Covid-19 en Chile, han disminuido las cifras de denuncias por violencia. Sin embargo, las llamadas a las líneas de orientación psicológica han aumentado en un 60%. Específicamente en Línea Libre, las consultas sobre abuso y violencia llegaron a un 11,2% entre enero y diciembre de 2020.
En este sentido Diego Riveros, psicólogo de Línea Libre asegura que “la disminución en las denuncias y el aumento en las consultas se debe a que las víctimas están permanentemente con su agresor. Además, no se han establecido mecanismos de denuncia que sean seguros y hay una falta de redes apoyo que brindaban los establecimientos educacionales, la familia extensa o los espacios comunitarios”.
Finalmente, el profesional también agrega que las verdaderas consecuencias de esto se verán reflejadas a largo plazo, ya que el silenciamiento de las víctimas es parte de las dinámicas de violencia y abuso. Esto significa que por medio de manipulación, chantaje u otras estrategias, los agresores no permiten que las víctimas rompan el silencio y pidan ayuda. Por ello, se pueden demorar años e incluso décadas en hacerlo.